***&"&"&" ZunaMij "&"&"&***

Esta una leyenda desde antes de que este planeta existiera o mejor dicho haya vida, viene de otra galaxia donde habitan otros planetas, allí había uno especial llamado Zunamij.  Ese mundo estaba dividido en dos, el bien y el mal. Pero había una joven que vivía en el medio o el centro. Se llamaba Mij la hija de Zuna, el creador del planeta. Zuna dejo a su hija desde pequeña, hizo un viaje largo hacia otras galaxias y le dijo que volvería para venir a buscarla. Mij creció en libertad y como no tenia conocimiento del bien ni del mal, no le encontraba diferencia... Para ella donde hay mal es para bien y donde hay bien es para mal... Y podía relacionarse tanto por un lado como por el otro. Pero cuando volvía a su lugar, se encontraba sola. El mundo cada vez se diferenciaba mas y a medida que iba creciendo las divisiones eran mas extremas y nadie compartía su espacio. Entonces un día queriendo buscar una unión, o compartir su lugar, pensó que tenia que vivir un tiempo en cada división para enseñarles su manera de ver las cosas y lograr, quizás, una sabiduría mayor que tiene que ver con el amor.

Decidió empezar con el mal, cuando llego vio un gigante portón con una serpientes rojas apoyadas cómodamente en la entrada con varios alimentos a su alrededor y en sus ojos estaba el acceso. Cuando Mij se acerco enseguida se erizaron, ella sintió el temor que infundían, como respeto o dominio y la observaron y como Mij se quedo quieta, volvieron a su comida. Entonces la joven comenzó a  golpear con fuerza el portón para que le abran, pero nadie abría. Miro a las serpientes como buscando una respuesta y se le vinieron encima, la enroscaron casi a punto de asfixiarla... la miraron bien a los ojos, y sus ojos no eran los del lado contrario, entonces enseguida se desenroscaron y bajando por un pozo le abrieron las puertas. Ella tenia acceso a la entrada. Enseguida se cerraron detrás de ella, y con lo único que se encontró fue con un enorme campo desolado. Comenzó a caminar y vio a lo lejos una larga flor violacea, como un farol cuidando del lugar, se dirigió hacia ella y vio que sus pétalos tenían forma de escaleras. Acaricio a la flor para ver si recibía algún tipo de señal y comenzó a girar mientras sus pétalos  iban creciendo, de golpe cayeron hacia el pasto y este se abrió y los pétalos empezaron a descender en forma de escaleras por un túnel, entonces Mij se deslizo como si fuera un tobogán, bien hacia abajo, hasta que llego a una ciudad rodeada de luces, con aroma a opio, música, vampiros, brujas, gnomos. Vió hombres con mascaras y otros que se transformaban. Todo estaba permitido, y se sorprendió hasta en el trato de la gente, pero no querían reglas, y se basaban en una actitud suprema. Como sabían que Mij no venia del otro lado, sino de un espacio raro, era aceptada y llamaba mucho la atención. Ella comenzó a probar todo tipos de placeres que había en las zonas diferenciadas por colores. Luego conoció al Hechicero Negro y la sedujo hacia las tinieblas. Ingreso, en su curiosidad y no se asusto. Sus ojos tenían otra mirada y el Hechicero la envolvió en sus brazos y se enamoraron.  Pero sabia que no era de su naturaleza, tampoco era de su contrario, sino de una especie distinta y como en todo espacio existen códigos, él tenia que convertirla para que ingrese en su universo. Y la quería solo para él.  Mientras que ella solo buscaba dar a conocer su lugar natural, e invitar a otros a envolverse en ese espacio donde no existe ni el bien ni el mal. Muchos se sintieron tentados a conocer ese espacio, pero la gran mayoría ya eran fanáticos de su especie, esa lucha les generaba pasión y no podían ver las cosas o sentirlas de otra manera a como ya estaban acostumbrados, y otros la tildaron de loca. Pero el Hechicero Negro armo un plan para convertirla. Mij estuvo el tiempo necesario y luego de atravesar varias sensaciones, decidió que ya era hora de conocer el otro lado. Y se traslado hacia el portón del bien, donde había dos aves blancas en la puerta. Gigantes como dinosaurios, con su pico colorado y de ojos del color del cielo, la miraron con la belleza de su postura, con sus alas le acariciaron sus cabellos, ella cerro los ojos y su corazón voló como impregnada de suavidad. Luego le hicieron cosquillas y rió tanto como una niña, que cayo al suelo sin poder parar de reír. Entonces la aves con sus alas mágicas abrieron el portón. Ella tuvo acceso a la entrada. Allí vio un arco iris en forma de puente que la traslado como en un viaje hacia el Jardín del Amor. Ahí vio estrellas por todos lados, es que todos brillaban como granos del sol, y la recibió un Emperador Luminoso que le soplo unas chispas de sonrisas. Mij sintió una alegría sin limites, tenia ganas de reír de todo, saltar, gritar y jugar como una niña. El emperador le dijo que ellos siempre tenían las puertas abiertas hacia cualquiera que quiera ingresar, pero que ella debía convertirse como en todo espacio para lograr su armonía. Mij decidió quedarse un tiempo, para conocerlo mejor y pensarlo. A medida que transcurría el tiempo, ella les fue comentando sobre su espacio, invitando a la gente a que se sumara a su lugar. Pero solo causo una revolución, ellos no podían aceptar el mal en ninguna de sus formas. Y ella les decía que en ese espacio no existe el mal. Sino que el mal y el bien están unidos de tal manera que no hay diferencia entre uno y otro. Nadie podía entender su manera de ver. Entonces pensaron que era una niña, que el mal se estaba apoderando de ella y la estaba volviendo loca y entre ellos  se dijeron que “si vino hasta acá es por algo, Dios nos esta mandando una señal y es que la tenemos que ayudar a que se convierta y a través del sufrimiento que se arrepienta de todas sus ideologías”. Mij decidió irse, se dio cuenta que la gente no estaba preparada para sentir de otra manera y que su manera de ver las cosas y de sentir estaba creando una revolución en los demás que daba miedo. Cuando volvió a su lugar, se sintió tranquila, pero algo había en el ambiente diferente, no se sentía como antes. Es que la habían perseguido, tanto el sector del bien como del mal.  Ambos querían convertirla. El Hechicero Negro tenia que hacer que sus sentimientos se vuelvan oscuros, que le surga pasión por la venganza, el resentimiento, el odio, etc. Y el Emperador Luminoso tenia que lograr que se arrepintiera de todas sus ideologías, dándose cuenta que solo el bien triunfara, y que mientras siga pensando de otra manera se la castigara para que aprenda. En fin su espacio se convirtió en una guerra entre los dos polos que antes vivían en armonía. Lo que no entendían es que no pertenecía ni a uno, ni a otro, ella estaba en un espacio mas elevado, como su padre, Zuna, le había enseñado. Pero ambos sectores comenzaron a pelear por la posesión de Mij como si fuera un objeto.  A medida que iba pasando el tiempo, comenzó a sentir que estaba ella sola contra todos. Luchando por su espacio natural que antes vivía en equilibrio y que ahora se quería destruir. “Ese espacio no tiene que existir”, gritaban: “es un peligro”. Ambos sectores, destruyendo lo único que mantenía una unión.  Mij fue tironeada por ambas partes y secuestrada. Cuando estaba en posesión de un sector, el otro sector le hacia la guerra y así la fueron destruyendo. Luego el otro sector la secuestraba y venían del otro lado y la golpeaban hasta sacarle ese sector y así sucesivamente era una guerra entre ambos. Como ninguno de los polos lograba su deseo fue  secuestrada, de tal manera que le robaban conciencia, voluntad, energía. Estaba casi sin vida y sin poder defenderse, comenzó a pedir auxilio a su padre a rogar que acudiera a salvarla, pero ya casi no tenia fuerzas para llamarlo. Zuna es el único que sabe que dejo a Mij, en su lugar, para que logre el sostén del mundo, sin Mij el mundo se muere, los dos polos no tienen quien lo sostenga y caen hacia el precipicio, tanto el bien, por un lado, como el mal, por el otro. Pero el hombre todo lo que ve distinto que puede afectar su espacio hacia el cambio, tiende a destruirlo y por eso los hombres son probados una y otra vez en diferentes ambitos. El mundo estaba tan salvaje que no podía ver que el punto de unión era lo que sostenía la existencia.

Cuando Zuna volvió, por un presentimiento inmenso, como llamado por las estrellas, encontró a su hija mutilada y sin respiro... pero, seguía ahí, en el mismo espacio donde la había dejado. Lloro varios días y varias noches, fue tanto el dolor que decidió irse a otra galaxia y sabia que si se llevaba a su hija el mundo se moría. Pero esta vez decidió llevársela. Se dio cuenta que nada aprendieron los hombres de la vida. Las lagrimas fueron tantas que en los cielos no se volvió a ver el sol, se formo una tempestad oscura llena truenos y relámpagos que caían hacia la tierra y la lluvia era tan intensa que duro casi cien días y cien noches seguidas... Hasta que se inundo el mundo, se partió y cayo al precipicio.